Es heredero del Clan Gnecco, fue alcalde de Gamarra (Cesar) hasta 2019 y se reunió en su finca con Otto Bula y Marcio Marangoni, uno de los directivos brasileños, con el fin de cuadrar cómo legalizar $1.000 millones a través de una cantera de la región. Revista RAYA revela documentos del entramado de corrupción por el que señalan al actual congresista conservador desde Brasil, pero no lo investigan en Colombia.
Por: Enrique Gamboa
Investigador Revista RAYA
En medio del escándalo que generó la multa que recibió el Grupo Aval por parte de la justicia de Estados Unidos, la Fiscalía de Francisco Barbosa reaccionó rápido ante el pedido del presidente Gustavo Petro de reabrir los casos de corrupción de Odebrecht en los que están involucrados funcionarios públicos y empresas privadas en Colombia. La medida fue anunciada por el fiscal Gabriel Jaimes el pasado 18 de agosto desde Cartagena, e incluyó a 33 funcionarios públicos. No obstante, hay un nombre que omitió y que tiene mucho que ver en los sobornos: Libardo Cruz Casado, actual congresista conservador quien fue el encargado de intermediar para que Otto Bula recibiera $1.000 millones de pesos por medio de la compra ficticia de material en una cantera de su amigo el exalcalde de Gamarra (Cesar), Gabriel Giraldo Escudero. La Revista RAYA revela la declaración del directivo de Odebrecht, Marcio Marangoni, quien detalló ante el Ministerio Público de Brasil y funcionarios de la Fiscalía de Colombia la historia de esta oscura y oculta operación.
Según su testimonio, entregado el 23 de enero de 2020, él conoció a Libardo Cruz Casado en noviembre de 2015, días después de que este ganara las elecciones locales que lo convirtieron, con el 53% de los votos, en alcalde de Gamarra (Cesar). La reunión fue pactada por los lobistas de Odebrecht Otto Bula y Federico Gaviria y se realizó en una finca del alcalde Cruz, ubicada entre los municipios de Aguachica y Gamarra (Cesar). Así lo recordó Marangoni quien para la época se desempeñaba como director de contrato de la Ruta del Sol II: “Bula y Gaviria me invitaron a la reunión con el nuevo alcalde. Por estar estudiando Ocaña - Gamarra yo conocía al antecesor, al señor Giraldo, pero al sucesor yo no lo conocía, entonces, claro que yo los acompañé, para saber quién era el alcalde con el que yo tenía que tener relación”, dijo el directivo de la multinacional durante la diligencia judicial.
Conoció a Libardo Cruz Casado en noviembre de 2015, días después de que este ganara las elecciones locales que lo convirtieron, con el 53% de los votos, en alcalde de Gamarra (Cesar).
La reunión era con el fin de que el entonces electo alcalde, hoy representante a la Cámara por el Partido Conservador, le ayudara a Marangoni a legalizar dinero para amortiguar la deuda que tenía Odebrecht con los lobistas. De acuerdo con la declaración de Marangoni, una manera de conseguir la plata para pagarle a Bula y a Gaviria era elaborar un contrato lícito para adquirir material de cantera (piedra, arena, granito) en el que se camuflaron los $1.000 millones fingiendo que Odebrecht recibió una cantidad que no fue real: “Acá la idea era que yo pagara por anticipado para tener el derecho de explotación de la cantera. Entonces voy y digo: cuánto vale todo el material que está ahí, a ver, tres mil millones. Yo pago anticipado para tener el derecho de explotación mil millones y después, conforme voy retirando el material. Entonces, la idea era que yo daría $1.000 millones para Bula y después yo aumentaría la retirada de material, porque yo iba a utilizar material, es decir retiraba 20 mil metros cúbicos, pero anotaba que retiraba 40, entonces los 20 mil ficticios irían para ese anticipo que era ilegal”, explicó el directivo de Odebrecht.
De acuerdo con la declaración de Marangoni, una manera de conseguir la plata para pagarle a Bula y a Gaviria era elaborar un contrato lícito para adquirir material de cantera (piedra, arena, granito) en el que se camuflaron los $1.000 millones fingiendo que Odebrecht recibió una cantidad que no fue real
La trampa la hicieron a través de la empresa Movimiento de Ingenieria, Diseños y Servicios (Midas), propiedad de Gabriel y Jaime Giraldo Escudero, el primero el alcalde saliente de Gamarra, que entregaba el cargo a Cruz Casado y quien era el dueño de la cantera que utilizó Marangoni para pagar los sobornos a Otto Bula. Cruz era el encargado de contactar a los hermanos Giraldo, conocidos como “Los Mellos”, para ejecutar la operación ilegal: “Yo acordé todo. El contrato fue firmado en noviembre y en diciembre de 2015 fue el pago del anticipo. Otto me dijo que se quedaría con $1.000 millones. Yo no puedo afirmar si ese valor total fue traspasado a Bula y a Gaviria, por Gabriel o por Jaime, o cuanto pidieron ellos por hacer este tipo de cosas, tampoco sé cuánto pidió, o hizo, por ese acuerdo Libardo”, puntualizó el directivo de Odebrecht.
La trampa la hicieron a través de la empresa Movimiento de Ingenieria, Diseños y Servicios (Midas), propiedad de Gabriel y Jaime Giraldo Escudero, el primero el alcalde saliente de Gamarra, que entregaba el cargo a Cruz Casado y quien era el dueño de la cantera que utilizó Marangoni para pagar los sobornos a Otto Bula.
Lo cierto es que en la reunión de noviembre de 2015 Libardo Cruz Casado se comprometió a buscar a “Los Mellos” para lograr el cometido de Marangoni, quien así lo dejó explícito en su declaración: “Me reuní con Libardo y le dije si conocía a los hermanos Giraldo. Me dijo: si los conozco. Le dije que si podía ayudar a generar esos valores con los hermanos Giraldo Escudero, porque ellos tenían una cantera ya aprobada con nosotros y estaban dispuestos a hacer ese traspaso de plata para Bula. Él me dijo que iba a hablar con los dos y creía que sí. De esa forma le avisé a Bula y a Gaviria que había encontrado una solución y quedó acordado que Libardo hablaría con Gabriel y Jaime para hacer un contrato que suministre material de cantera, en cuya mayor parte sería suministro virtual”.
En la reunión de noviembre de 2015 Libardo Cruz Casado se comprometió a buscar a “Los Mello”
Marangoni no tenía otra opción. En junio de 2015 Marcelo Odebrecht, el presidente de la multinacional, había sido capturado en Brasil y las sanciones que recibió la empresa, en el marco de la Operación Lava Jato, generó que los directivos en distintos países del continente no pudieran utilizar el Departamento de Operaciones Estructuradas, creado para pagar los sobornos a nivel regional. Por eso, al ver que Odebrecht no cumplía con los compromisos en los pagos de los sobornos, los dos lobistas llegaron a las oficinas de la multinacional, ubicadas en el Parque de la 93 en Bogotá, para hablar con Marangoni. “La presión era fuerte, incluso Federico (Gaviria) indicaba que tenía obligaciones con personas para pagar, que los llamaba como indeseables.Yo me asusté con la presión de los lobistas y le comenté a (Eleuberto) Martorelli, presidente de Odebrecht en Colombia, la situación. Él me dijo que tenía que buscar alternativas para poder bajar la presión”. Por esa razón, cinco meses después, el directivo brasileño estaba en la finca de Libardo Cruz Casado buscando alternativas para pagar la deuda.
Los dos lobistas llegaron a las oficinas de la multinacional, ubicadas en el Parque de la 93 en Bogotá, para hablar con Marangoni. “La presión era fuerte, incluso Federico (Gaviria) indicaba que tenía obligaciones con personas para pagar, que los llamaba como indeseables
A pesar de que la Fiscalía conoce todos estos detalles desde enero de 2020, pues en la diligencia en la que Marangoni entregó todos estos detalles se encontraba la exfiscal Amparo Cerón, una de las ternadas por Gustavo Petro para se ahorar fiscal general de la Nación, apenas el pasado 17 de agosto la entidad anunció desde Cartagena una nueva imputación de cargos contra funcionarios públicos y empresas privadas involucradas en los sobornos de Odebrecht en Colombia. Precisamente, detallando que los dueños de la empresa Midas, los hermanos Giraldo Escudero, o “Los Mellos”, serán imputados por su intervención en la compañía para el pago de sobornos. Así lo detalló Gabriel Jaimes, fiscal delegado ante la Corte Suprema de Justicia, quien se encontraba acompañado del fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa: “El exalcalde de Gamarra (Cesar), Gabriel Alberto Giraldo Escudero, y su hermano Jaime Heli Giraldo Escudero, por su intervención en la Compañía Midas S.A.S, para el pago de los sobornos; por último, a los Socios propietarios de Midas S.A.S. Lina María Bermúdez Aljuri y Diego José Mantilla Velásquez, serán imputados por lavado de activos y enriquecimiento ilícito de particulares ya que habrían permitido usar su empresa para entregar dinero a terceros por disposición de los directivos de Odebrecht”.
Esto ocurrió tan solo siete días después de que se conociera la multa de la justicia de Estados Unidos contra el Grupo Aval por los sobornos de su socia, la multinacional, y de que el presidente Gustavo Petro le solicitara al fiscal Barbosa reabrir los casos en Colombia para encontrar a los destinatarios de los sobornos de Odebrecht.
No obstante, misteriosamente el nombre del exalcalde de Gamarra y actual representante a la Cámara, Libardo Cruz Casado, no fue mencionado por Jaimes ni está siendo investigado por la Fiscalía por su accionar como bisagra del entramado a través del cual Otto Bula recibió $1.000 millones en sobornos. La Revista RAYA contactó al congresista para escuchar su versión de los hechos, sin embargo, el representante Cruz solamente expresó: “no sé de qué me habla”, y acto seguido cortó la llamada.
Cruz terminó su alcaldía en diciembre de 2019, elegido por el partido Opción Ciudadana y respaldado políticamente por “Los Mellos”, quienes a su vez son aliados políticos del Clan Gnecco en el Cesar. Terminó con ocho procesos en su contra en la Procuraduría, donde no ha pasado nada, y el año pasado, de la mano del partido Conservador y de toda la estructura del Chance en ese departamento, saltó de la administración municipal al Congreso de la República donde ocupa un escaño en la Cámara de Representantes y hace parte de la Comisión Cuarta que trata asuntos relacionados con leyes presupuestales, fiscales y financieras, gracias a los 33.911 votos que obtuvo en marzo de 2022.
Marangoni, el consentido de Odebrecht
Durante su declaración de enero de 2020, Marangoni recordó todos los detalles de cómo llegó a Odebrecht, incluso, cómo logró ser uno de los hombres poderosos de la multinacional en Colombia. Contó que en enero de 1988, cuando tenía 21 años, ingresó a la empresa de Marcelo Odebrecht como auxiliar técnico en carreteras. En más de 30 años de servicios a la multinacional se desempeñó en diez cargos y participó en nueve proyectos de infraestructura, entre hidroeléctricas y carreteras. Durante la audiencia realizada en el estado de Sao Paulo recalcó la importancia que tuvo la empresa en su vida. Quien es hoy uno de los testigos clave para conocer el trasfondo de la corrupción de Odebrecht a nivel continental aseguró que le debe su carrera profesional a la empresa, pues fue el único sitio donde trabajó en su vida, además, dijo que gracias a ella pudo pagar su carrera universitaria: “Odebrecht me dio la oportunidad de llegar al cargo al que llegué y le debo mi formación profesional de Ingeniero Civil”.
Marangoni llegó a Colombia en 2013 como director de contrato con la misión de ganar las licitaciones de las carreteras 4G que estaban en proceso de licitación en ese entonces. “Yo debía estudiar la conquista de algunas de esas carreteras. Dentro de esos paquetes estaba la Ruta del Sol II donde la empresa ya venía estudiando con la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) la posibilidad de un Otrosi en el contrato”, manifestó. Asimismo, recordó que para la época de su llegada el brasileño Eleuberto Martorelli fue designado director superintendente en el país, puesto que equivale al presidente de la compañía en Colombia, con la misión de cambiar la estrategia en el proceso de trabajo para ganar la licitación de la Ruta del Sol II. Así lo detalló Marangoni: “Él me invitó a ingresar a Colombia para que con mi experiencia y mi formación en el área comercial y en licitaciones, pudiera ayudarlo con los proyectos que él tenía para la época que básicamente eran dos: la Ruta Del Sol II, que era una concesión, y la transversal de Boyacá, que era un proyecto con Invias”.
En la misma declaración de 2020, donde el brasileño aceptó su responsabilidad en el entramado de corrupción, salpicó a muchos funcionarios de la ANI de participar en actos ilegales, algunos investigados por la Fiscalía y otros sancionados por la Procuraduría. Uno de ellos es Germán Grajales Quintero, exsecretario técnico de la ANI, quien fue acusado por Marangoni de haberse reunido con él por orden de Eleuberto Martorelli en el centro comercial Unicentro de Bogotá. Según el directivo brasileño, el encuentro fue el 9 de mayo de 2013 en local La Bolera a las 8:00 de la noche. “Yo me senté con el señor Grajales, le expliqué el proyecto y le dije que necesitaba su ayuda. Él me dijo: Marcio yo no tengo actuación directa con las personas involucradas en esto, pero como secretario general técnico puedo influir a estas personas para hacer asequible el proyecto”. Ante la justicia brasileña y los funcionarios de la Fiscalía, Marangoni aseguró que Grajales Quintero le pidió $300 millones para que Odebrecht ganara la licitación de la Ruta del Sol II.
Uno de ellos es Germán Grajales Quintero, exsecretario técnico de la ANI, quien fue acusado por Marangoni de haberse reunido con él por orden de Eleuberto Martorelli en el centro comercial Unicentro de Bogotá. Según el directivo brasileño, el encuentro fue el 9 de mayo de 2013 en local La Bolera a las 8:00 de la noche.
Finalmente, el pago al secretario técnico de Invias, según el directivo brasileño, se realizó en febrero de 2014 por medio de un contrato de un tercero. Sobre Germán Grajales Quintero hay que decir que el pasado 5 de septiembre de 2023, la Procuraduría confirmó un fallo en su contra que lo destituyó y lo inhabilitó de su cargo por 10 años, debido a irregularidades que se presentaron en la ejecución del programa Corredores Prioritarios para la Prosperidad. No obstante, al igual que Libardo Cruz Casado, por ahora tampoco tiene una investigación en curso por los sobornos de Odebrecht y la adjudicación ilegal de la Ruta del Sol II.