El Sistema Operativo de Movilidad del Oriente Sostenible (SOMOS) se creó durante la alcaldía del hoy gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, como una empresa para articular el transporte en el Oriente antioqueño. Ocho años después y $36.000 millones gastados, SOMOS sigue sin cumplir con la construcción de una terminal, la puesta en marcha de un sistema integrado de transporte y el proyecto de un tren ligero. Contraloría y Fiscalía investigan.
Por: Unidad Investigativa Revista RAYA
El 25 de noviembre de 2022 centenares de busetas de transporte municipal en Rionegro (Antioquia) paralizaron sus rutas y bloquearon la principal vía que comunica a ese municipio con el Oriente antioqueño. El paro duró tres semanas y afectó a miles de usuarios de esa región, incluído el tránsito por la concurrida autopista entre Medellín y Bogotá. El paro, convocado por los gremios del transporte del municipio, puso en jaque al alcalde de entonces, Rodrigo Hernández, exgerente de EDESO (Empresa de Desarrollo Sostenible del Oriente) y amigo personal del hoy gobernador Andrés Julián Rendón, quien llegó a la administración municipal con la maquinaria del parapolítico Rubén Darío Quintero, como lo contamos en una investigación publicada la semana pasada.
Los transportadores de Rionegro han liderado dos paros en dos años. El más reciente, de tres semanas, se extendió entre noviembre y diciembre de 2022, mientras que en 2021 la ciudad ya había vivido otro paro de una semana por las mismas razones.
“Es una falta de respeto, y yo sí quisiera decirle a los orientales, a los ríonegreros, que hoy por hoy no tenemos una posición del Gobierno de Gustavo Petro frente al tema de transporte. Una problemática en la región del Oriente antioqueño, porque el Ministro de Transporte no ha acudido al debate de control político acá”, declaró el senador del Centro Democrático Esteban Quintero en la Comisión Sexta del Senado el 28 de noviembre de 2022, a propósito del paro que sucedía en su tierra natal.
Quintero, quien es hijo del condenado parapolítico Rubén Darío Quintero y a la vez primo hermano del hoy gobernador Andrés Julián Rendón, se apresuró a culpar del paro al actual Gobierno Nacional, pero no le dijo a sus colegas y al país que la responsabilidad de la crisis era obra de su propia familia. La razón: Andrés Julián Rendón, como alcalde de Rionegro, y luego su sucesor Rodrigo Hernandez Alzate fueron los encargados de idear, estructurar y contratar un sistema de movilidad que no tuvo planeación ni concertación con los gremios del municipio. Hoy, ocho años después los 36.000 millones de pesos se gastaron, pero el sistema no opera.
El senador uribista Esteban Quintero Cardona, primo hermano del gobernador Andrés Julián Rendón, y el condenado parapolítico Rubén Darío Quintero, tío de Rendón, asistieron a la celebración del cumpleaños del gobernador el 9 de enero de este año.
Un largo camino de irregularidades
El 1 de abril de 2016, cuando arrancaba su mandato en la alcaldía, Andrés Julián Rendón obtuvo la aprobación del Concejo Municipal de Rionegro para crear el Sistema Operativo de Movilidad del Oriente Sostenible (SOMOS). Una empresa descentralizada del municipio que tiene como objetivo “planificar, diseñar, conformar, construir, operar, recaudar y gestionar sistemas de transporte y movilidad”. En la práctica, SOMOS se convirtió en otra empresa descentralizada de papel, utilizada por el alcalde Rendón y su sucesor Hernández para direccionar miles de millones de pesos de recursos públicos sin necesidad de realizar licitaciones públicas.
Con este poder, el entonces alcalde Rendón, a través del decreto 194 del 9 de junio de 2019, creó el sistema “SONRÍO”, subordinado a la empresa SOMOS. Este modelo integrado de transporte pretendía realizar la integración operacional y tarifaria de todas las rutas del municipio e incluía la incorporación de nuevos métodos de movilidad, entre ellos, un sistema de bicicletas públicas y un tren ligero, para el cual la alcaldía de Rendón contrató un año antes unos estudios jurídicos. En ese mismo decreto, Rendón se atribuyó facultades para “reestructurar” el transporte público colectivo municipal. Esto implicaba modificar, eliminar o fusionar rutas ya existentes, obligando a todas las empresas del municipio a implementar un sistema de recaudo centralizado bajo el control de SOMOS.
El nuevo modelo de transporte propuesto por la administración municipal no contó con el aval de los gremios de transportadores locales ni fue consultado con el Gobierno Nacional en cabeza del entonces presidente Iván Duque. La nula concertación fue confirmada por el viceministro de transporte Juan Camilo Ostos, ante la Comisión Sexta de la Cámara de Representantes el 8 de mayo de 2019. Si bien el Ministerio de Transporte tenía conocimiento de una iniciativa para implementar un sistema de transporte masivo en Rionegro, Ostos aclaró que no se conocían a fondo los detalles de dicho proyecto, “motivo por el cual no se verificarán las condiciones técnicas, operativas y legales en que se desarrollará”, puntualizó.
En el resto de su respuesta a la Cámara de Representantes, el viceministro Ostos reiteró que no había ni un sólo documento o soporte que demostrara que la iniciativa del alcalde Rendón había sido acordada y socializada con el Gobierno Nacional.
Juan Camilo Ostos, viceministro de transporte de Iván Duque, reveló en un oficio a la Cámara de Representantes que el proyecto de integración del transporte no se había concertado con el Gobierno Nacional.
A pesar de estas advertencias, los alcaldes Rendón y Hernández contrataron y gastaron más de 36.000 millones de pesos en 48 contratos, la mayoría de ellos otorgados a dedo, para la estructuración del nuevo modelo de movilidad municipal. Este modelo actualmente no está funcionando.
El proyecto del tren ligero, concebido como el eje central del nuevo sistema de transporte, con un trazado de 17 kilómetros que atravesaría Rionegro de norte a sur, se convirtió en el primer gran fracaso. Para este proyecto, Rendón comprometió recursos de las vigencias futuras del municipio por el extravagante monto de 5 billones de pesos a lo largo de 25 años. Sin embargo, esta decisión fue anulada en 2021 por un fallo del Tribunal Administrativo de Antioquia, dejando el proyecto sin financiación.
De acuerdo con una publicación del portal Mi Oriente, Rendón, acompañado de varios funcionarios (entre ellos Hugo Parra, quien posteriormente se vio involucrado en el caso de corrupción de los CAI en Rionegro), realizó un viaje a Brasil entre el 25 y el 30 de julio de 2016. El objetivo del viaje era conocer de primera mano un tren de la empresa Aeromovel, que opera en trayectos cortos de entre uno y tres kilómetros, utilizando una tecnología de propulsión por aire comprimido. Tras el viaje, se anunció la posibilidad de implementar un modelo similar en Rionegro, a pesar de que no existía evidencia alguna que demostrara el éxito de esta tecnología en recorridos tan largos como el contemplado para el proyecto, que tenía un trayecto de 17 kilómetros.
Las irregularidades no terminaron allí. Un documento que revela RAYA demuestra que el viaje a Brasil no fue oficial, como Rendón lo afirmó en ese entonces al portal Mi Oriente. Además, la Secretaría de Hacienda, en respuesta a un requerimiento del Concejo Municipal en 2021, confirmó que la alcaldía no cubrió los gastos del viaje, incluyendo tiquetes y demás costos. Esta revista le consultó el tema a Rendón, pero no ha obtenido respuesta concreta frente a una pregunta: ¿quién financió el viaje a Brasil cuando está demostrado que no fue con recursos públicos?
La Secretaría de Hacienda no registra pago del viaje de Rendón a Brasil con fondos públicos, indicando que habría un financiamiento por parte de la empresa interesada en el tren ligero, lo que configura una irregularidad por posible conflicto de intereses.
Previo al viaje, el proyecto del tren ligero había tenido un revés mayor: en tres oportunidades, la rueda de negocios que buscaba posibles interesados en su construcción, quedó desierta.
La viabilidad del proyecto siempre estuvo en duda, entre otras cosas porque Rionegro cuenta con poco más de 130.000 habitantes. La ley 310 de 1996 y el CONPES 3167 de 2002 establecen que solo las ciudades con más de 600.000 habitantes pueden recibir financiación de la Nación.
A pesar de estas limitaciones, la alcaldía se gastó 1.807 millones de pesos en un estudio de 2016 con la firma Steer Davies Gleave. Este contrato otorgado de manera directa, en un contrato interadministrativo a través de la Asociación de Municipios del Altiplano del Oriente Antioqueño (MASORA), también presenta conflictos de interés. Masora es una asociación privada gestada décadas atrás por el exalcalde y excongresista Rubén Darío Quintero, quien ha sido empleado por ésta después de su salida de la cárcel tras cumplir su condena por parapolítica.
Tras el viaje de Rendón, se destinaron 12.847 millones de pesos adicionales al proyecto del tren ligero, mediante cuatro contratos, dos de ellos otorgados de manera directa, según un oficio de la Secretaría de Planeación del municipio enviado al Concejo de Rionegro en junio de 2021 en el marco de un cabildo abierto. A pesar de la evidente inviabilidad del proyecto, la alcaldía de Rodrigo Hernàndez insistió en su ejecución aunque hubiera podido evitar que el tren fuese un elefante blanco.
La alcaldía de Rodrigo Hernández reconoció ante el Concejo Municipal haber gastado más de doce mil millones de pesos en un proyecto de tren ligero inviable.
Paralelamente al tren ligero, que ya perdía 12.000 millones, el alcalde Rodrigo Hernández intentó materializar el plan de transporte masivo dejado por Andrés Julián Rendón, cuyo objetivo era arrebatar el control del negocio a las empresas transportadoras tradicionales, que por décadas han prestado el servicio en el municipio, y entregarle ese recaudo a SOMOS, la empresa creada por la propia alcaldía.
Sin embargo, la improvisación y la arbitrariedad marcaron la gestión de ambos mandatarios. Durante ocho años, las alcaldías de Rendón y Rodrigo Hernández, expidieron medio centenar de decretos y actos administrativos, en poder de RAYA, modificando tarifas y rutas a su antojo. Se implementó un sistema de cobro con tarjetas electrónicas que costó 360 millones y que no funcionó. La alcaldía además ejecutó 290 millones en la “socialización” del sistema, la cual, al igual que el inicio de las nuevas rutas, se aplazó, por lo menos, en cinco ocasiones. Incluso, el alcalde Hernández le cambió el nombre al sistema que pasó de llamarse SONRÍO a SITIRIO.
RAYA verificó el 13 de abril el abandono de la estación satélite, del sector conocido como Empanadas Caucanas, la cual se utiliza para el consumo de sustancias psicoactivas.
El proyecto de transporte masivo de Rionegro contemplaba dos troncales y varias rutas alimentadoras, pero nunca llegó a funcionar. La alcaldía de Rendón construyó, entre 2018 y 2019, paraderos de busetas y unas estaciones satélites en La Morelia y otro sector conocido como Empanadas Caucanas, con un costo de 1.316 millones de pesos, mediante cuatro contratos. Sin emabrgo estas estaciones quedaron abandonadas y saqueadas y ninguna ha entrado en operación hasta la fecha.
De igual manera, la Terminal de Transportes de Belén, cuyo contrato por más de 12.500 millones de pesos fue adjudicado de manera directa a la empresa SOMOS durante la alcaldía de Roddrigo Hernández Alzate en 2021, también presenta múltiples retrasos y aún no ha sido puesta en funcionamiento, a pesar de que debió ser entregada en diciembre pasado
Arriba: En 2022, la Contraloría General de la República alertó sobre el evidente estado de abandono de varias terminales satélites del sistema de transporte integrado de Rionegro, declarando un presunto detrimento patrimonial de casi 300 millones de pesos. Abajo: A pesar de su elevado costo de más de 12.000 millones de pesos, la nueva terminal de transporte de Belén, ubicada sobre la autopista Medellín - Bogotá, permanece inoperante. La fotografía es de agosto de 2023.
Por esos hechos, la Contraloría Municipal llamó la atención a la empresa SOMOS por el retraso injustificable en la construcción de la terminal de transporte de Belén, señalando que la obra, proyectada para cinco meses llevaba 17 meses sin concluir. El informe de auditoría del 2021 concluyó: “no se realizó una adecuada aplicación del principio de planeación y economía en los estudios previos, ya que, se evidencia que el tiempo prorrogado es igual o mayor al tiempo contractual estipulado inicialmente”. A la fecha, la obra acumula 29 meses de retraso.
La Contraloría, además identificó un presunto detrimento patrimonial por 295 millones de pesos que se embolataron en 2021, cifra que, según la veeduría ciudadana, se queda corta frente a todas las irregularidades que existen alrededor del sistema masivo..
Carlos Osorno, veedor ciudadano de Rionegro, dijo que después de ocho años, miles de millones de pesos invertidos en proyectos inviables y dos paros de transportadores, la movilidad en el municipio es igual a la que existía antes de que Andrés Julián Rendón y su sucesor Rodrigo Hernández impusieran un fracasado sistema de transporte masivo a través de la empresa SOMOS. Osorno criticó la negativa de la administración municipal a entregar copia de los estudios técnicos, mediciones y encuestas que, según esas alcaldías, fundamentaron la creación del sistema de transporte masivo, información que ha sido solicitada durante ocho años por los gremios de transportadores.
Diego Macía, Miguel Valencia, Fernando Valencia y Leidy Baena, exconcejales de oposición de Rionegro, en noviembre de 2021 interpusieron una denuncia penal contra Rendón, su sucesor Rodrigo Hernández y dos de sus funcionarios en la empresa SOMOS: David Orlando Quintero y Óscar Rendón, exgerentes, argumentando un presunto detrimento patrimonial que podría constituirse en delitos contra la administración pública por “millonarios contratos que a la fecha no se ven los resultados, pero que han impactado negativamente el patrimonio de los rionegreros”. Sobre esto la Fiscalía está en indagación, pero no se ha pronunciado.
Por el momento, David Orlando Quintero y Rodrigo Hernández salieron premiados: ambos consiguieron un puesto en la Gobernación de Antioquia tras el triunfo de Andrés Julián Rendón el año pasado.
Cuatro exconcejales de Rionegro presentaron una denuncia penal contra los exalcaldes Rendón y Hernández por el gasto de más de 36 mil millones en contratos para un fallido sistema de transporte masivo
RAYA confirmó que la investigación por esta denuncia penal, que involucra a otros funcionarios además de Rendón en presuntos delitos de peculado por apropiación, sigue activa en la Fiscalía 28 anticorrupción de Medellín, aunque no se conocen avances. Jorge Rivas, el actual alcalde de Rionegro, quien fue funcionario en las alcaldías de Rendón y de Hernández, respaldado también por Rendón para llegar al poder, no contestó a RAYA cuándo empezará a funcionar el sistema de transporte integrado masivo de Rionegro. Dijo que en estos momentos su administración se encuentra en la “construcción y aprobación del Plan de Desarrollo”. SITIRIO, como se llama ahora, sigue sin operar a pesar de que sus dos antecesores le invirtieron más de 36.000 millones de pesos que hoy no se sabe en manos de quiénes quedaron.
*Al cierre de esta investigación Andrés Aristizabal, secretario de desarrollo territorial de Rionegro, contestó al cuestionario que habíamos enviado al alcalde Jorge Rivas, indicando que el sistema SITIRIO ya se encuentra de nuevo en marcha aunque la nueva administración no ha destinado recursos aún para su funcionamiento. En palabras de Aristizabal "ya son dos administraciones trabajando en la modernización del transporte público en nuestro municipio, lo que estamos es retomando el dialogo y las concertaciones con las empresas de transporte y con los propietarios de vehiculos con el fin de afianzar el ambiente de confianza que hoy les brinda nuestro alcalde y seguir cumpliendo con un cronograma de acciones que se han venido acordando". Este funcionario agregó "el pasado 19 de marzo se dio un primer encuentro con los gerentes de las empresas de transporte que están habilitadas para el servicio de transporte municipal, tambien asistieron representantes de los propietarios". Aristizabal concluyó que cuando se termine la concertación con los gremios "se hara la presentación oficial para continuar con la implementación del sistema de transporte público de nuestro municipio".