A partir de este miércoles 23 de noviembre inicia la cuarta edición del Forensic Tech, un espacio en donde expertos y científicos de México, Estados Unidos, España y Guatemala, junto con sus pares colombianos, discutirán sobre los avances de la ciencia en la búsqueda de personas desaparecidas en escenarios transfronterizos y los océanos. Esta es la historia de una loable iniciativa transnacional.
Por: Revista Raya
Un novedoso espacio multipropósito, compuesto por organizaciones científicas, academia y agencias de cooperación internacional, le apuesta desde hace 4 años a poner a Colombia en el centro de las discusiones sobre las ciencias forenses en el continente con un horizonte claro: avanzar en herramientas científicas ciertas para encontrar a los miles de personas desaparecidas durante el conflicto armado colombiano. Esta semana, vuelven a encontrarse presencialmente en Bogotá y abordarán las desapariciones en frontera. Un tema denso pero clave.
Hace tres años, el 3 de septiembre de 2019, en un modesto evento en el auditorio de la Universidad Externado de Colombia, se dieron cita 14 expositores de 7 países y cerca de 200 asistentes para hablar de ciencias forenses, tecnología y búsqueda de personas desaparecidas. A primera vista un tema bastante denso y especializado. Sin embargo, en medio de las 14 ponencias hubo una que llamó poderosamente la atención.
Eric Sapin y Quentin Millet, dos expertos en fotografía forense y en la reconstrucción fotográfica de escenas del crimen (asociados al School of Criminal Justice (ESC) de la Universidad de Lausanne, Suiza), centraron su charla en algo que denominaron “Análisis de imágenes y reconstrucción de sucesos”. La ponencia contaba la historia de cómo usaron cientos de fotografías y videos de reporteros, de cámaras de seguridad y otras fuentes de información para reconstruir los hechos que llevaron a la muerte de 21 civiles, 5 soldados, 1 periodista y más de 800 heridos en los levantamientos violentos del 10 de abril de 2010 en Bangkok, destinados a la Comisión de Investigación para la Reconciliación de Tailandia. La sorpresa: casi dos años después periodistas y defensores de derechos humanos de Colombia utilizarían elementos muy parecidos para la reconstrucción de los excesos de la Fuerza Pública contra la población civil durante el estallido social de 2021.
En dicha conferencia, a la que asistieron además de estudiantes de ciencias forenses y afines, se señaló la importancia de ampliar los campos de investigación (por operadores de justicia, por ejemplo) y de adaptar nuevas metodologías. Este último es el componente innovador de Forensic Tech Colombia, que pretende poner sobre la mesa temas que en el país estamos lejos de discutir en amplitud. Hacerlo de la mano de expertos internacionales, con experiencias verificables, es estar un paso adelante.
Luz Adriana Pérez, jefa de investigación científica y formación de Equitas, organización forense independiente creadora del Forensic Tech, señala que este espacio, desde 2019, planteó la necesidad de traer ciencia y tecnología aplicada a las ciencias forenses. Esto, con el fin de aportar a problemas relacionados con las violaciones a los derechos humanos. “Hemos contado con socios como el Comité Internacional de la Cruz Roja, la Universidad Externado de Colombia, el Programa de apoyo a la construcción de la paz en Colombia – ProPaz II de la Agencia de Cooperación Alemana para el Desarrollo – GIZ…y hemos podido traer invitados internacionales que nos han compartido su conocimiento para aportar a la resolución de problemas forenses complejos.”.
Problemas que en realidad han tenido sus misterios: arquitectura forense; análisis de imágenes y reconstrucción de eventos; identificación genética; isótopos estables; análisis estadístico en derechos humanos; sistemas de información geográfica aplicada; preservación y cuidado de personas desaparecidas en cementerios; caracterización de muertes en conflicto; bioética; uso de armas no letales en la protesta social; estimación de universos de víctimas y búsqueda de personas desaparecidas en escenarios complejos. Estos, por nombrar algunos de los temas abordados en las tres ediciones anteriores del Forensic Tech.
Las experiencias han sido muchas en el cruce de saberes de más de 30 expertos de 12 países en las 3 versiones del Forensic Tech. Según Luz Adriana Pérez, este intercambio de conocimiento les ha permitido a los investigadores colombianos aproximarse a escenarios complejos de búsqueda tales como los escenarios acuáticos, en concreto los ríos, que son lugares en donde hay cientos de desaparecidos en la guerra de nuestro país. “Este año vamos a tener una discusión sobre (la búsqueda en) los océanos. Estos escenarios de intercambio son fundamentales para acercar a los científicos, a las personas que trabajan este tema día a día y poder expandir el conocimiento buscando nuevas experiencias que permitan resolver los retos en casos de violación a los derechos humanos…es un camino difícil tratar de aproximar estas experiencias al Estado, pero hemos tenido acogida por parte de algunas instituciones. Hemos dialogado con Medicina Legal y Fiscalía para presentar estas nuevas tecnologías y plantearles nuevos contactos y metodologías. Es difícil pero absolutamente necesario”.
Este año, el Forensic Tech tendrá la visita de expertos y científicos de México, Estados Unidos, España y Guatemala, quienes junto a sus pares colombianos tendrán como eje de discusión la búsqueda de personas desaparecidas en escenarios transfronterizos y otros escenarios complejos como los océanos. Asimismo, se debatirá sobre los avances tecnológicos en inteligencia artificial para la identificación forense y las experiencias de las entidades del Estado para encontrar a las personas desaparecidas en la guerra. Adicional a ello, el Forensic Tech se estrenará el documental de Equitas y otras organizaciones, sobre la experiencia científica de búsqueda de personas desaparecidas en el río La Miel, en el municipio de Samaná (Caldas), lugar donde la Unidad de Búsqueda de personas dadas por Desaparecidas entregó a sus familiares, en mayo pasado, a cuatro de estas víctimas.
De cara al futuro, Forensic Tech Colombia parece no tener un límite y las posibilidades son infinitas. En futuras ediciones el espacio y sus creadoras señalan la importancia de abordar, por ejemplo, la genética. Por eso, para el Forensic Tech Colombia 2023, los organizadores pretenden contar con la presencia del doctor Ángel Carracedo de España, que es una persona con un amplio conocimiento en nuevas estrategias desde la genética forense, con el fin de poner en discusión nueva información como las técnicas para hacer estimación de la edad de las personas encontradas durante la búsqueda.
En un país con aproximadamente 80.000 personas desaparecidas, según datos del Centro de Memoria Histórica, el esfuerzo de las científicas de Equitas y Forensic Tech Colombia, no solo es loable sino desafiante y necesario, pues la tecnología no está enfocada ni en los derechos humanos ni en las víctimas. Ahora, solo resta esperar que las entidades del Estado, encargadas de estos temas, no solo incluyan en sus agendas la asistencia al evento, sino también, apoyar este paso adelante que está dando la ciencia.
Más información en www.forensictechcolombia.com