Por: Óscar David Montero De La Rosa
Desde aquel 12 de octubre de 1492 nada volvería a ser igual en la Tierra del Abya Yala, nombre ancestral que el Pueblo GunaDule da a lo que hoy se conoce como América. Los Guna, que habitan entre Colombia y Panamá, la consideran así porque en dulegaya significa Madre Tierra, madre viva, tierra en completa madurez, tierra floreciente, tierra sin límites y sin fronteras, muy distinto a lo que hoy ha logrado imponerse con las lógicas de los Estados nación y su distribución político administrativa.
Hermanos de Lucha de diferentes Pueblos Indígenas de Colombia. Archivo personal. Óscar Montero.
531 años después de la interrupción genocida con la llegada de los españoles al territorio de los mayas, aztecas, incas y tayronas, son hijos e hijas directas, sobrevivientes victoriosos de la "conquista", la colonización y toda forma de dominación que se ha querido imponer sobre la vida y los territorios indígenas, seguimos diciendo: Aquí estamos, resistiendo y re-existiendo.
Armonización en el territorio ancestral del Pueblo Zenú y Mokaná. Archivo personal. Óscar Montero. 2023
Llegan a la memoria de la escritura imperfecta de este texto, el dolor, la lucha, la resistencia, la dignidad y la esperanza de los antiguos y de los de ahora, un solo tejido vital de los hijos de la tierra, de esa fértil y floreciente que nos recuerda que somos sus guardianes.
No nos han podido acabar y no nos acabarán, hoy somos 115 Pueblos Indígenas en todo el territorio nacional, habitamos debajo de la tierra, en la tierra y encima de ella. Seguimos luchando, seguimos resistiendo aunque nos estén matando porque la conquista no ha acabado, la conquista continúa con balas y con palabras.
Palabras de la Vicepresidenta Francia Márquez. Archivo personal. Óscar Montero. 2023
Los tiempos de la violencia se han mantenido, y si en la supuesta conquista hubo el genocidio más grande de la humanidad, en tiempos de paz, el genocidio continúa sin reversa.
Palabras de apertura del espacio de concertación. Archivo personal. Óscar Montero. 2023
Hoy se mata a los guardianes del territorio, pero también se mata al territorio. Se represan ríos, se contaminan lagunas, se socava los órganos de la madre tierra, se saca la sangre de la tierra (el petróleo), se bombardean montañas y se apuñala a la tierra con las antenas de comunicación que se le clavan en su cuerpo.
Diálogo con la Vicepresidenta Francia Márquez. Archivo personal. Óscar Montero. 2023
La horrible noche de aquel 12 de octubre no ha acabado, el desangre de ríos y montañas sigue vigente. Ante esta barbarie los pueblos hijos de la tierra siguen tejiendo vida y propuestas desde el buen vivir que permitan cambios estructurales en el país, que contribuyen a la paz total que tanto necesita Colombia.
Cada 12 de octubre los pueblos indígenas, nativos u originarios de Abya Yala recordamos, conmemoramos y resignificamos este día como el de la resistencia indígena, pero también recordamos, igual que en 1492, nuestra tragedia, el genocidio físico y cultural.
Hermanos de Pueblos Indígenas del Norte del país. Archivo personal. Óscar Montero. 2023
Y como dice el libro compilado por Carlos Salamanca y Alcida Rita Ramos ‘Genocidios Indígenas en América Latina’, genocidios indígenas nunca más, como una denuncia, como una declaratoria al mundo, en donde junto a otros hermanos indígenas y no indígenas de Argentina, Brasil y Colombia escribimos y alzamos nuestra voz para decir nunca más.
Igualmente, una declaratoria de lucha y resistencia que hace el primer telar de la memoria histórica de los pueblos indígenas de Colombia: tiempos de vida y muerte, memorias y luchas de los pueblos indígenas. Tiempos de vida y muerte porque la muerte y la vida para nosotros son ciclos de nuestra existencia. Los tiempos de la mala muerte son los genocidios indígenas.
Libro “Genocidios Indígenas en América Latina” / Libro “Genocidios Indígenas en América Latina”.
Archivo personal. Óscar Montero. 2023
Nuestros sitios sagrados están mandatando desde la ley de origen, derecho mayor y ley natural restablecer el equilibrio y la armonía, volver al origen, cumplir con estos mandatos es sanar todas las violencias que hemos vivido, es decir las violaciones históricas de la larga duración, violencias producto del colonialismo, racismo y discriminación y las mismas violencias producto del conflicto armado que ha sido desproporcional y que aún sigue vigente.
Este gran reto que hoy lo tiene la Comisión Intersectorial de Reparación Histórica para Pueblos Étnicos, creada mediante Decreto 820 de 2023 y el Estado en su conjunto, celebramos su creación y la posible efectividad que tendrá si se logra una amplia participación en los diálogos, en la toma de decisiones, y las concertaciones. Esta es una construcción propuesta por los mismos pueblos étnicos, víctimas históricas de estas prácticas.
Y fue preciso este pasado 12 de octubre de 2023 en la ciudad de Cartagena, como forma de re-existencia en el territorio ancestral del pueblo zenú y mokaná donde se instaló en un evento muy simbólico y lleno de la fuerza de los que aún sobrevivimos de esta barbarie: indígenas, afrodescendientes, raizales, palenqueros y rom la comisión intersectorial, pero donde además realizó su primera sesión con el más alto nivel de representantes del Estado y de los Pueblos Étnicos.
En esta Comisión llegamos los 9 delegados indígenas después de un acuerdo con la vicepresidenta de la República de Colombia en el marco de la mesa permanente de concertación con los pueblos y organizaciones indígenas de Colombia, este fue el acuerdo: "Se acuerda modificar el Decreto 820 de 2023 para garantizar la inclusión real y efectiva de los Pueblos y Organizaciones Indígenas en la Comisión Intersectorial Nacional de Reparación Histórica. Para ello, se conformará una comisión técnica mixta con los Pueblos Indígenas y la Vicepresidencia que sesionará el día 17 de octubre de 2023 que tendrá por objeto la elaboración conjunta del proyecto de modificación del Decreto 820 de 2023, criterios de selección de los delegados en la Comisión, así como el respectivo trámite hasta su expedición. El proyecto de decreto de modificación en lo relacionado al número de integrantes será protocolizado en el marco de la MPC", en el cual estuve como delegado del movimiento indígena e hice lectura en el espacio para ratificar nuestra postura y participación, ahora queda que este se pueda materializar y hacer efectiva nuestra participación.
El camino ya está andado y solo esperamos que cada 12 de octubre se conmemore nuestra existencia y se tenga memoria para realmente sanar y reparar desde el corazón. Ese corazón bonito que nos enseñaron nuestros sabios y sabias indígenas del pueblo zenú, wayuu, wiwa y murui muina, palenqueros y afros en el lanzamiento de la comisión intersectorial en la emblemática Plaza de la Trinidad, lugar de memoria y resistencia afrocaribeña ubicada en el corazón de Getsemaní, el mensaje de ellos fue: sanar, purificar y proteger desde el canto, la danza y la palabra.
¡Sanar desde el corazón, es poder amar para vivir!